lunes, 7 de enero de 2019


No hay lanza 
ni piedra
para arrojar el corazón  
no hay una habitación blanca
ni una ventana
para esconder la muerte 
no hay oídos 
ni tachaduras 
ni perlas que corten el cuello como tus palabras  
no hay miedos 
ni rincones
que duelan más que tu cuerpo sobreviviente 
no hay más silencio ensordecedor
ni claraboyas
para mirar dentro de tu pecho  
no hay justificación 
ni sitio bajo el algarrobo 
para corromper tu mar 
muchacho de todos los miedos 
las sombras y los gorriones 
no hay noche 
ni soga
que sepa más de tu pavor de moneda  
rodar como un pétalo 
ah! si saltas al ruedo  
tendré que abrazarte
con estas perras ganar de maullar
y lo que quede sea nuestra piel 
de la tierra crezca el animal que vomita la sed  
seamos reflejo para olvidar el amor
el caos
transgredir algunas leyes de la ubicuidad

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